¿Cómo se usa el Vitroesmalte?
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La importancia del curado.
El Vitroesmalte es una pintura al agua similar a nuestro Esmalte Acrílico, pero que requiere un curado imprescindible para lograr altísima resistencia: el horneado. Mediante este proceso ─30 minutos en horno casero a 150°─, la pintura adquiere una terminación vitrificada súper resistente a los lavados, incluso utilizando detergente y esponja.
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La importancia de revolver y no batir.
El componente que le otorga capacidad cubritiva y resistencia a la pintura suele decantarse en el fondo del envase cuando pasa cierto tiempo en la misma posición. Por ello es imprescindible revolver suave y constante con un palillo. Pero, ¡atención!: no es lo mismo revolver que batir o agitar porque estos procesos pueden generar burbujas en la pintura que aparecen tras el horneado.
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La importancia de evitar el contacto con alimentos.
Si bien es una pintura al agua y sin componentes tóxicos, diversas sustancias (aceites, ácidos, alcohol, etc.) de los alimentos podrían actuar sobre ella en forma negativa y hacer que se desprenda alguna partícula. Por ello recomendamos no pintar interiores de vasos, tazas, bowls ni fuentes. Realizar intervenciones específicamente decorativas, no utilitarias.