¡Corregir errores
en un mural!
Sin dudas, pintar a gran escala plantea desafíos extras.
Renata Würschmidt nos adentró en los tips básicos para pintar murales en casa y, esta vez, comparte algunos secretitos para arreglar esas pifiadas que siempre nos encontramos en el quehacer. ¡Imperdible!
Gotas fuera de lugar
Trabajar en vertical impone sus destrezas y, si el trabajo es a gran escala, ni hablar. Así que es de lo más frecuente que alguna gota caiga fuera del lugar deseado. ¡A no desesperar que hay solución! Tanto para cuando la pintura está fresca, como para cuando ya secó. Para el primer caso, Renata simplifica: un trapo húmedo y se limpia rápidamente. Para el otro caso, “pueden pintar encima directamente con el color que iba en ese lugar. Si la gota cayó en un lugar que no llevaba pintura, con una lija al agua podrían también sacarla (también consideren que siempre se puede agregar un lunar de color justo a esa zona. Ja, ja, ja.)”.
Gris comodín y salvador
Es muy fácil abstraerse en las pinceladas y seguir de largo con el color equivocado en una zona que tenía asignado otro… Es la magia de la pintura, pero al momento de volver a tierra: hay que corregir.
“Si en esa zona tienen designado pintar con un tono más claro, los grises claros son muy buenos para corregir. Depende de qué color quieran poner arriba, pero casi que se los aconsejaría más que la corrección con blanco”.
Fuera de la pared:
la ropa y utensilios
La pintura sale fácilmente de la piel con agua tibia y de los pinceles con agua tibia, con un poco de detergente o jabón blanco, si no tienen lavapinceles. “La pintura acrílica que uso para pintar los murales no es tempera, es decir que, si se manchan la ropa, salvo que lo limpien en el momento, se va a adherir a la trama. Pero ¡ojo! Tampoco es para usarla para pintar sus prendas porque seguro que cuando laven o planchen, la pintura se les va a correr (para ello existe la Pintura para Tela)”.
@renatawur
Mendoza- Argentina