¿Cómo preparar tu lienzo
con
Gesso Acrílico?
La incorporación de la tela como soporte para las pinturas supuso un gran avance en la historia del arte. Si bien su uso se remonta a la Antigüedad, fue recién en el Renacimiento cuando se generaliza y expande desbancando al muro y a la tabla como soporte pictórico por las ventajas que ofrecía el lienzo frente a los soportes tradicionales: resistencia a la humedad, la posibilidad de trabajar en formatos más grandes, menor costo, conservación y transportabilidad por su ligereza y la posibilidad de enrollarlo.
Reutilizar un bastidor pintado con acrílico
De la misma manera, el Gesso Acrílico Eterna es un excelente aliado para reciclar un bastidor. Si estaba pintado con acrílico, “con solo dar dos manos cargadas, lijando entre una y otra, lograremos una superficie bien blanca, sellada, uniforme y 100 % impermeabilizada que nos motivará para comenzar una nueva obra”, resume Nora.
Si en el bastidor habíamos utilizado óleos, sugiere asegurarse de que tenga como mínimo más de seis meses de secado y lijarlo antes de aplicar el Gesso Acrílico Eterna para comenzar desde una superficie bien lisa. “También es importante tener en cuenta que si la obra que queremos tapar tiene mucha carga de pintura o fue pintada, por ejemplo, con espátula, puede llegar a quedar cierta textura”, aclara.
Lienzos preparados para ejercicios
“En el trabajo de exploración, de estudio, muchas veces surge un muy buen resultado, y esta es una manera económica de guardar estas obras, de archivarlas y tenerlas listas para luego enmarcarlas y embastarlas si hace falta”.
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